viernes, 19 de junio de 2020

Reseña del libro "El sistema de la iglesia ramera", de Charles Elliot Newbold jr.

Isaac Penington escribió en 1667 que cuando su corazón comenzó a permitir que el Señor lo iluminara, el Espíritu de Dios  lo condujo a huir de las "tradiciones eclesiásticas cristianas" y lo guió a participar en la hermandad de quienes anhelaban una vida profunda en el Señor. Del consejo de alejarse de la religión, "tanto las Escrituras como el Espíritu de Dios me dieron testimonio", escribe este santo.
No es inusual encontrar escritos, testimonios, o referencias de hombres y mujeres en Cristo que, en un momento dado de su vida profunda en el Señor, fueron conducidos a salir de las estructuras eclesiásticas de su tiempo. Solemos pensar que sólo en estos días el Señor está abriendo vías de escape de las religiones, y abriendo La Puerta a la Vida más pura y profunda en Cristo, pero en verdad esto ocurre y ocurrió también en cada punto de la historia donde uno pose su vista. En cualquier época en la que busquemos hombres y mujeres que salieron de la religión, los encontraremos. Y es que no es una cuestión de este tiempo, ni de otro tiempo: es cuestión de lo que busca y anhela el corazón de los santos.
Hace algunos años, frente a la atrocidad desplegada por las estructuras religiosas, corría por nuestra mente la pregunta de cómo cambiar esas estructuras a fin de que los santos pudiésemos vivir plenamente la vida de Cristo en vez de la vida institucionalizada de "esa cosa llamada iglesia religiosa". En una conversación con un hermano, su respuesta fue clara: "Las estructuras religiosas son sostenidas por la ceguera de las personas, pero cuando un santo es transformado por la vida del Señor, indefectiblemente deja esas estructuras. No es una cuestión de cambiar estructuras, sino de transformar corazones".
No se trata de dilucidar las formas correctas o incorrectas de practicar la vida de iglesia. NO. Primero se trata de ver si estamos en la vida de fe en Cristo Jesús. Y si decimos que si, seguramente sentiremos urticaria frente a los ritos que tan alegremente celebra esa cosa que llaman religión cristiana.
Aquí recomendamos el libro "El sistema de la iglesia ramera" de Charles Elliot. Es un libro tremendamente confrontativo con "esa cosa que llaman iglesia". El autor se levanta -con conocimiento de causa, y con la luz del Espíritu- contra toda estructura que la religión carnal de los hombres ha levantado. Se llame como se llame esa religión o denominación, la raíz de ella es la carne, la naturaleza ajena a Dios.
El autor no hace otra cosa que traducir en palabras lo que un santo ya puede haber visto en su espíritu si se ha propuesto a salir de "Babilonia, la ramera".
En las primeras hojas del libro, el autor confronta con el bisturí de la verdad:
"Se nos ha hecho creer que esta cosa que llamamos iglesia es de Dios y que nuestra membresía y participación en ella es esencial para nuestro caminar cristiano cuando de hecho, es un sustituto idolátrico de Jesús, y con frecuencia, un estorbo para caminar con Él. 
Hemos confundido nuestra relación con Cristo fusionándola con esta cosa que llamamos iglesia. Somos llevados a creer que cuando estamos en una relación correcta con ella, estamos en una relación correcta con Cristo, que tenemos que ser miembros de una iglesia para ser salvos o para ser un buen cristiano: que servir a ella es servir a Cristo, que amarla es amar a Cristo, que diezmar para ella, es diezmar para Cristo".

Se suele pensar que si algo no "es de Dios, se caerá pronto". Error: la religión es algo que está en la tierra desde la caída del hombre, y estará hasta el final de los tiempos.
Para este libro, como para otros que comparten similar tenor, solemos repetir el mismo consejo: las religiones están llenas de "vacas sagradas" protegidas por aquellos que sacan provecho de ellas. Este libro expone a estas vacas sagradas de la estructura religiosa. 
Pensé decenas de veces si recomendar este libro o no, porque es muy fuerte. Y lo hago porque creo que es una obligación de cada uno de nosotros alertar al resto de los santos si hemos detectado algo que creemos es contrario a Dios.
Si crees que en la "llamada iglesia" (religiosa, y con minúsculas) está todo bien, y te ofende que toquen tus dogmas, cultos o creencias religiosas, POR FAVOR NO LEAS este libro, porque es realmente fuerte.
Pero léelo si el Señor ya te mostró esa manipulación a la que se dedica "Babilonia", si ya saliste de ella y ahora aspiras a crecer en la vida y libertad en Cristo Jesús.

(El libro puede bajarse gratis en pdf o leerlo en la web haciendo CLICK ACÁ)